El programa de rehabilitación cardiovascular es aplicable a pacientes con insuficiencia cardíaca, valvulopatías, cardiopatía isquémica en sus distintas facetas, hipertensión, dislipemia, diabetes o incluso, pacientes sanos portadores de factores de riesgo. El programa de actividad física es supervisado por cardiólogos y profesores de educación física. La intensidad se determina según la ergometría y se incrementa en función de la respuesta del paciente al tratamiento.